Prisioneros del sistema
Comida rápida, autopista, microondas, odiamos a los semáforos, la luz amarilla es sinónimo de luz verde en muchos casos, tocamos la bocina bien fuerte cuando alguien se para un ratito, no permitimos que algún peaton cruce la calle, queremos ganarle el lugar al auto de al lado. Con todo esto, ¿se dieron cuenta que tenemos tecnologÃÂa que nos facilitan algunas cosas; pero cada vez andamos más apresurados y tensionados?
Hace dos dÃÂas atrás vi una pelÃÂcula interpretada por el genial actor Adam Sandler; “Click“, mi hermano habló un poco de este tema en su blog; bueno, lo que yo quisiera hablar es sobre cómo este sistema nos puede atrapar, sin necesidad de darnos cuenta que estamos bien metidos; y en el peor de los casos olvidando lo básico de la vida.
Hasta donde va la semana, ¿nos hemos puesto a pensar sobre nosotros?, ¿le hemos dedicado tiempo a nuestra familia?, ¿he pensado sobre mi futuro?. En la pelÃÂcula el protagonista consigue el control universal, él tiene la posibilidad de avanzar en el tiempo y evitar momentos feos o no muy gratos; pero en todo ese movimiento él perdió grandes momentos junto a su familia: ver crecer a sus hijos, ayudarlos, se perdió el último “te amo hijo” de parte de su padre, descuidó a su esposa; practicamente perdió mucho, muchÃÂsimo. Al final de la pelÃÂcula y antes de dar su último respiro, reconoce la importancia de dar tiempo y aprovechar cada segundo para poder estar con las personas que amaba; pero, como que ya era un poco tarde para eso.
No sé cuál sea tu apuro; pero espero que este sistema no te agarre y te haga correr a su velocidad. Toma un tiempo para valorar lo que tienes a tu alrededor, a tu familia dedÃÂcales un pequeño “te quiero mucho”, toma un tiempo para hacerle saber a tus amigos que son importantes en tu vida; toma el tiempo necesario para hacer esto, ten en cuanta que cualquier rato puede ser el último momento.
creo que tenes razon, es tan fina la linea entre la preocupación y la despreocupación que es mejor ser concientes de que todos los dias tenemos que entregar lo mejor de nuestros años a aquellos que realmente nos aman, que no son la compu la tele ni el equipo de musica, si no nuestros padres, hermanos y amigos…
buenisimo!
Bueno!! ya se en qué termina la pelÃÂcula!! jajajajajaaj
Es tal cual lo decÃÂs… vivimos apurados sin darnos cuenta que es necesario sentarse un rato y pensar… compartir…. disfrutar, de algo parecido hablo en mi blog… desde mi percepción de las cosas.
Hoy es dia de visitas a los blogs amigos y sorprendentemente me doy cuenta de la infinidad de maneras que hay de expresar una sola cosa, en los que voy visitando hasta ahora muchos hemos dicho lo mismo en nuestros blogs… pero de manera distinta, qué lindo no¿?
Asi somos los bolivianos! pero no nos hemos dado cuenta…
Besos y Abrazos!
Tan sencillo como eso querida Carolina, tan simple como lo que acabas de comentar. Realmente me gustó la última frase que escribiste: “Los Bolivianos somos diferentes; pero no nos hemos dado cuenta”. Viendo todo esto, tenemos un gran desafÃÂo los que, de alguna manera, nos hemos dado cuenta de eso; es muy bueno tenerte de este lado.