¡Estas Suchas!
Lunes, por la mañana, con el sur en las nubes y entonces miré que acechaban.
No suelen perseguir, ni agitarse en vano, solo estan rondando si sospechan de alguna muerte.
Las miraba desafiante, porque mis sueños, mis poemas, mis versos, mi guitarra, mi café, mi conciencia y mi ansiedad… viven en mí.
¡Viven! Pero seguían ahí.
Yo aún no entendía.
Pensé un momento… ¡con razón! ¡Estas suchas son tan oportunistas!
Sí, ya entiendo el por qué, tu amor ya había muerto.